En una era donde el béisbol fue dominado por los bateadores de poder, Omar Vizquel se destacó como un maestro de la defensa campocorto, que, durante más de dos décadas, deleitó a los seguidores del beisbol con su excelso guante.
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A lo largo de su carrera, Vizquel solo cometió solo 183 errores, lo que es una cifra sorprendentemente baja para un parador en corto que jugó 2709 juegos en esa posición dejando u maravilloso porcentaje de fildeo de .985 lo que da prueba de las garantías que ofrecía a la defensiva.
Gracias a ello, el venezolano fue galardonado con 11 Guantes de Oro lo que lo coloca en la élite de los defensores, demostrando que su arte en el diamante fue apreciado y valorado por jugadores, entrenadores y aficionados por igual, aunque aún no ha sido reconocido para llevarlo a Cooperstown.
Vizquel, también aportaba con su madero, al disparar 2877 inatrapables, siendo hasta hace unos años el venezolano con más imparables en la historia de las Grandes Ligas, después de ser superado por su compatriota Miguel Cabrera.
Sin duda alguna, Vizquel está en el podio de mejores campocortos en la maravillosa y amplia historia de las Grandes Ligas, en donde han existido grandes defensores, pero entre ellos destacó el guante del denominado “Manos de seda”.