Desde hace unos años, Stephen Curry y Golden State Warriors revolucionaron la NBA con su estilo de juego enfocado en el tiro de tres puntos. Los "Splash Brothers", el dúo formado por Curry y Klay Thompson, llevaron esto al máximo nivel y se consagraron como dos de los mejores lanzadores de la historia de la liga.
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A diferencia de Curry, Thompson es más un tirador a pie firme y lo ha demostrado en muchas ocasiones al no necesitar el drible para ajustar su lanzamiento. Hace siete años, el escolta de Warriors tuvo una de las noches más prolíficas en la historia reciente de la NBA al anotar 60 puntos en solo 29 minutos.
60 en tres cuartos
El 5 de diciembre de 2016, frente a Indiana Pacers, Thompson tuvo una noche espectacular y consiguió anotar 21 de 33 tiros de campo, incluyendo 8 de 14 en triples, para sumar 60 unidades en solo tres periodos en el tabloncillo del Oracle Arena, antigua casa de Warriors.
Además, lo más llamativo de ese juego es la cantidad de tiempo que el jugador tuvo el balón en sus manos y la cantidad de dribles que necesitó para alcanzar esa cifra de puntos. Thompson solo tocó el balón durante 90 segundos y lo puso sobre la duela en 11 ocasiones, demostrando su capacidad para anotar saliendo de la cortina y con poco tiempo de preparación.
Esta fue una de las actuaciones más efectivas para un jugador en la modernidad de la NBA. Thompson fue sinónimo de efectividad dentro del tabloncillo y demostró que es el complemento perfecto para Stephen Curry dentro de Warriors.
Actualmente, el escolta de Golden State no está viviendo su mejor momento y, luego de varias lesiones que lo mantuvieron apartado durante varias campañas, esto es la prueba perfecta de lo que es capaz Thompson con su gran porcentaje en los tiros de larga distancia.