A pesar de la creciente indiferencia hacia el Día de San Valentín, la Generación Z y los millennials demuestran que el interés por celebrar el amor persiste. Según una encuesta de OnePoll en nombre de HI-CHEW, estas generaciones aún valoran la ocasión y anticipan con ilusión una cita especial.
Comenzando con el punto de partida, el 41% de los encuestados prefiere que la cita inicie con un gesto encantador, ya sea en forma de flores o un regalo. Asimismo, el 33% aprecia la clásica cortesía de ser recogido en casa, subrayando la importancia de crear una experiencia desde el primer momento. Por ejemplo, una invitación a cenar a un lugar emblemático de la ciudad o que se asocie con la relación es una buena idea.
En cuanto a los detalles, la preferencia por los dulces destaca entre la Generación Z, con un 30% inclinado hacia esta elección, en comparación con el 24% de los millennials. Un toque azucarado para endulzar la cita parece ser un elemento distintivo, marcando la pauta para una velada memorable.
Las actividades clásicas mantienen su atractivo, ya que el 59% opta por una cena, mientras que el 33% elige el cine como opción. La combinación de compartir una comida y disfrutar de una película refleja la búsqueda de momentos tradicionales pero significativos para la celebración de este día especial.
La muestra de afecto no se queda atrás en la lista de prioridades para una cita perfecta. El 48% de los encuestados valora un tiempo a solas con su pareja, mientras que un beso de buenas noches ocupa el 43%, subrayando la importancia de la conexión íntima en esta jornada romántica.
Cuando se trata de la culminación gastronómica, el postre se erige como protagonista. Un 41% considera indispensable cerrar la comida con un dulce, superando al plato principal (40%), aperitivos (10%), y entradas (3%). Este detalle resalta la importancia de endulzar la experiencia para sellar la velada con un toque memorable.
En cuanto a los postres preferidos, las fresas bañadas en chocolate lideran con un 49%, seguidas de cerca por la tarta de queso (45%), mousse de chocolate (28%), y helado de fresa (25%). Algunos optan por sabores más exclusivos, como manzana acaramelada (11%), tarta de cerezas (9%), y tarta de limón (9%).
Finalmente, en términos financieros, se espera que los participantes gasten en promedio $114 dólares en su cita o salida para el Día de San Valentín, resaltando que, a pesar de la evolución de las actitudes hacia la celebración, existe un compromiso financiero significativo para hacer especial este día.
Estos resultados evidencian que, aunque las actitudes hacia el Día de San Valentín puedan estar evolucionando, las expectativas y deseos románticos persisten entre las generaciones más jóvenes. Eo que demuestra el compromiso de celebrar el amor en una sociedad que, en ocasiones, parece volverse indiferente.