Aunque parezca mentira a través de los años ningún jinete ha ganado el premio al atleta del año en Venezuela. Un galardón que se entrega desde 1944, tiene a sus máximos ganadores en el principal deporte del país; el beisbol. Sí, un total de 43 premios se han entregado a los deportistas que se desempeñan en esta disciplina, el segundo renglón más galardonado ha sido el atletismo (12) y el tercero el boxeo (11).
Todos en el país estamos claro que la pelota es el deporte nacional, de eso no hay dudas, pero colocar al hipismo en segundo puesto no es descabellado. Los venezolanos a través de la historia han demostrado que su pasión por el deporte de los reyes es intensa.
Incluso mucha de las frases que usamos están ligadas al hipismo; “Se quedó en el aparato”, “Este viene detrás de la ambulancia”, “Allá rodó”, Suerte y Gaceta Hípica, son alguna de las frases que se pueden oír dentro de las conversaciones cotidianas y todas provenientes del hipismo.
Con todo esto que he expuesto, llama poderosamente la atención que, ni las 16 estadísticas seguidas de Juan Vicente Tovar, las exaltaciones al Salón de la Fama de Ramón Domínguez y Javier Castellano incentivaran a los votantes para elegir a un deportista de esta disciplina.
En este 2023 Javier Castellano ha ganado; Kentucky Derby, Belmont Stakes, Travers Stakes, Jockey Club Gold Cup Stakes, entre otros grandes premios. En relación al Derby se convirtió en el tercer venezolano en conquistarlo y es el primer nativo en cruzar la meta de primero en el Belmont Stakes.
Aunado a eso, lleva al favorito para ganar la Breeders’ Cup Classic; Arcangelo. Castellano es, junto a Irad Ortiz, uno de los favoritos para ganar el premio Eclipse Award en Estados Unidos, un galardón que el zuliano ganó en cuatro años seguidos entre 2013 y 2016.
Además de estos cuatro premios como el mejor jockey del año es el país norteamericano tiene una hoja de vida que incluye: 5701 triunfos y $391.513.420 millones de dólares producidos, que lo colocan en el segundo lugar histórico de Estados Unidos solo por detrás de John R. Velázquez.
Pero a pesar de todos estos pergaminos, seguramente el premio no sea para él.