La relación de la cantante Taylor Swift con el jugador de fútbol americano Travis Kelce está dando sus frutos en términos de audiencia para la NFL. El último partido de los Kansas City Chiefs, en el que Kelce jugó frente a su novia, registró una media de 27 millones de televidentes, lo que lo convirtió en el juego de domingo por la noche más visto desde el Super Bowl LVII.
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Esta cifra representa un incremento del 22% con respecto al año pasado, cuando el partido atrajo a una audiencia de 22 millones de espectadores. En el punto más alto de la audiencia, el juego de los Chiefs contra los New York Jets llegó a los 29,4 millones de espectadores.
Medios estadounidenses aseguran que este pico en la audiencia está ligado a la asistencia de Taylor Swift al estadio Arrowhead para apoyar a su novio. La cantante, que es una de las artistas más populares del mundo, fue vista viendo el partido junto a la mamá de Kelce en un palco especial del estadio.
Este es el segundo partido consecutivo en el que los aficionados pueden ver a la cantante mientras anima al que es considerado como el mejor Ala Cerrada de toda la liga. En el caso del partido anterior esto causó mucho revuelo ya que fue visto por muchos como la confirmación de que Travis Kelce y Taylor Swift se encontraban saliendo.