Miami (especial).- El paso de Nicaragua en esta primera incursión en la Serie del Caribe ha sido, para la prensa de ese país, decepcionante. A pesar de llegar como invitado y en el papel considerado el equipo más débil del torneo, había generado mucha expectativa internamente al mantener la columna vertebral del equipo del Clásico Mundial, a la par de tener a Marvin Benard como manager.
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En el terreno de juego los "Nica" compitieron hasta donde pudieron. Su pitcheo sigue siendo uno de los puntos débiles, principalmente el bullpen, por lo que dilapidaron algunas ventajas. La lesión de dos jugadores titulares. Leyton y Montes, luego de chocar buscando un elevado en la primera jornada, debilitó aún más al equipo, minimizando las opciones del manager. La defensa es la segunda con más errores cometidos y la ofensiva ofensiva fue perdiendo gas con el paso de los días, quizá reflejo de un equipo que se diluyó derrota tras derrota.
La prensa local y Marvin Benard rompieron relaciones. El estratega se sintió muchas veces atacado en los postjuego y sus respuestas no asentaron muy bien en el gremio. Al mismo tiempo, los reporteros presentes en el loanDepot Park advirtieron una ruptura entre manager y jugadores, producto también de algunas declaraciones del estratega que acusó "falta de entrega" de sus jugadores.
"No creo que sea casualidad que luego de las primeras declaraciones del manager, el equipo se viniera abajo en partidos claves ante Curazao y Panamá" indicó Harold Briceño, periodista nicaraguense de Radio 800. La gran nota fue el apoyo del público, al menos en los primeros tres juegos, respondiendo a las expectativas planteadas por el comité organizador. Sin embargo, volver a contar a Nicaragua en una Serie del Caribe es incierto, considerando que la próxima edición será en México.
La relación entre entidades del país centroamericano y la Confederación del Caribe tuvieron un impasse hace algunos años, por lo que la posibilidad de que ingresará como miembro activo quedó en veremos.
"Va a ser difícil al menos pensar en estar de vuelta el próximo año, ya que la Serie será en México y estamos claros que fuimos invitados este año porque era en Miami y en el Clásico Mundial la gente respondió. Creo que el béisbol nicaragüense debe trabajar en eso, porque es necesario para el desarrollo del deporte" sentenció Briceño.