Iván Holguin López / @Ivan_baloncesto
El título al entrenador más longevo y fiel en la NBA sin lugar a dudas se lo lleva Gregg Popovich, el hombre que ha llevado las riendas de Spurs de San Antonio desde 1996 y que parece estar llegando al final de su carrera. Sin embargo, tras “Pop” y sus 24 temporadas al frente de los texanos, hay dos entrenadores que son los que le siguen en antigüedad: Erik Spoelstra y Rick Carlisle.
Ambos mandamases tienen estilos de juego y un pasado muy distinto, sin embargo, sus historias parecen haberse cruzado desde el año 2008, fecha en la que ambos entrenadores asumieron los roles que a día de hoy mantienen. Spoelstra en Heat de Miami y Carlisle en Mavericks de Dallas.
El humilde “coach Spo”.
Era abril de 2008, el Heat de Miami vivía una de las peores campañas en mucho tiempo solo 15 victorias y 67 derrotas. El entrenador que hizo al Heatcampeón en el año 2006, el legendario Pat Riley decidía retirarse definitivamente de su rol como entrenador para ocupar la presidencia del equipo y dejar al equipo en manos de su asistente Erik Spoelstra.
El “Coach Spo” venía trabajando con la institución desde el año 1995 como director de scouts, después se convirtió en coordinador de vídeo, hasta que en 1999 se convirtió en el asistente de Riley.
Spoelstra no jugó nunca profesionalmente, solo llegó al baloncesto universitario donde pasó sin pena ni gloria. Sin embargo, conocía desde hace mucho la liga, ya que su padre Jon Spoelstra fue un ejecutivo de la NBA para los Trail Blazers de Portland, Nuggets de Denver, Braves de Buffalo y Nets de New Jersey.
Desde ese 2008 el “Coach Spo”, quién se convirtió en el primer de ascendencia asiática en llegar a un banquillo de la NBA, ha dirigido al equipo en 12 temporadas, en más de 1000 partidos, superando la barrera de las 500 victorias y teniendo en solo 2 temporadas un registro negativo. Además ha clasificado al equipo a 8 playoffs llegando a 4 finales de liga, ganando 2 de ellas, con el famoso Big Three de James, Wade y Bosh.
El Jim Carrey de Dallas.
En mayo del mismo 2008 Rick Carlisle fue el escogido por Mark Cuban para hacerse cargo de la plantilla de Mavericks de Dallas en remplazo de Avery Johnson.
Carlisle, de gran parecido físico con el comediante canadiense Jim Carrey, jugó 5 años en la NBA, aunque en un rol muy secundario, pero eso no le privó de la oportunidad de ganar el anillo de campeón en 1986 con Boston.
Al no contar con más oportunidades como jugador, Carlisle decidió aceptar la oferta de convertirse en asistente de los Nets, luego pasó a Portland e Indiana para seguir en el mismo rol; hasta que en año 2001 se convirtió en el entrenador principal de Pistons de Detroit.
En Detroit, Carlisle tuvo dos años muy exitosos (100-68), además de llevarse el lauro a mejor entrenador de la liga en el año 2002 y confeccionando en gran medida al equipo que un año luego de su renuncia por desavenencias con los jugadores se convertiría en campeón de la NBA.
Su segundo trabajo como coach fue en Pacers de Indiana a quienes dirigió 4 años (181-147), su trabajo fue de más a menos y en 2007 salió por la puerta de atrás de los Pacers. Hasta que llamó Cuban.
Desde 2008 Carlisle ha dirigido a Mavericks por 12 campañas, más de 900 compromisos, sobrepasando la barrera de los 500 triunfos, clasificando al equipo a 7 playoffs y ganando el único título de la franquicia en la temporada 2010-2011.
Caminos cruzados.
Ahora bien aparte de que ambos entrenadores ocupan la segunda plaza de entrenadores, en activo, con más tiempo en un mismo banquillo, solo por detrás de los 24 años de Popovich en San Antonio. Pero esa no es la única coincidencia de ambos entrenadores.
Sus historias estaban condenadas a cruzarse. En el año 2010, LeBron James y Chris Bosh aterrizaron en Miami para junto a Dwyane Wade formar uno de los “Big Three” más fuertes de la historia. Por su parte, en Dallas, los Mavs querían llegar nuevamente a Playoffs y pasar de la primera ronda.
En Miami, luego de un comienzo algo flojo el equipo se enderezó, quedó segundo en su conferencia, la cual ganó cómodamente en Playoffs. Dallas que terminó tercero en el Oeste, venció a los campeones Lakers en semifinales de conferencia y su moral se fue a los cielos, permitiendo clasificarse a la segunda final de su historia.
El favoritismo era inherente a Miami y su temible trío, pero Dallas apoyados en el “buen alemán” Dirk Nowitzki tenían otras intenciones. Tras una batalla táctica librada en los banquillos por Carlisle y Spoelstra, los Mavs en manos de una pletórica actuación de Nowitzki (MVP de la final incluido) se llevaron el título de la liga.
Spoelstra después tuvo la oportunidad de ganar dos títulos seguidos antes de perder en su cuarta final al hilo frente a Spurs de San Antonio. Una histria cruzada la del “Coach Spo” y el “Jim Carrey de la NBA”, que seguro tendrá más capítulos en el futuro.